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Modalidades de esquí

En el esquí existen muchas y diferentes modalidades, que requieren diferentes habilidades. Si quieres probar alguna diferente, o simplemente saber de que se habla cuando escuchas términos como Telemark o Freestyle, te damos una explicación básica de las modalidades más conocidas.

Comenzamos por la más común, el Esquí alpino, recibe su nombre porque comenzó a practicase en los Alpes. Es con el que se inician los esquiadores en los cursos de esquí de Baqueira.

En competición, el objetivo es realizar el descenso en el menor tiempo posible, siguiendo el sendero trazado por unas balizas llamadas puertas.

El Telemark, recibe su nombre de la región de Noruega donde Sondre Norheim lo inventó. Su característica principal es que el talón no está fijado a la tabla. En este estilo es más importante tener un movimiento fluido que la velocidad, por lo que requiere un dominio de la técnica y un esfuerzo físico mayor. Si quieres revivir los orígenes del esquí en Baqueira, puedes tomar clases de telemark y aprender esta técnica.

El Esquí de fondo, también llamado esquí nórdico porque era la manera de desplazarse en países nórdicos, como alternativa más rápida a las raquetas.

El objetivo, es recorrer distancias en terrenos llanos y ondulados, normalmente en circuitos trazados especialmente para esta practica. En Baquira Beret podrás disfrutar de un área extensa para esta práctica y de cursos que te ayudaran a depurar tu técnica.

El Esquí de travesía, es el alpinismo con esquís, ascender un pico (casi siempre con los esquís al hombro) y realizar el descenso, es el cometido de esta modalidad. Permite disfrutar de la montaña en estado puro y requiere una preparación física y un conocimiento del terreno de gran nivel.

El Esquí Freestyle, se basa en hacer saltos, acrobacias y piruetas. Es muy espectacular, tanto si lo practicas como si lo disfrutas como espectador. Es necesario tener habilidad con las acrobacias, espontaneidad y creatividad.

El Esquí Freeride, popularmente conocido como esquí fuera pistas. Consiste en no recorrer ningún trayecto marcado, por montañas de nieve virgen. Los paisajes, las vistas y las emociones vividas en el freeride son impresionantes, pero el riesgo es muy alto, por lo que hay que conocer muy bien la montaña y sus condiciones, además de llevar material de seguridad.

La historia del esquí es muy amplia, lo que comenzó como una manera de desplazarse en zonas aisladas por la nieve, se ha convertido en un deporte muy extenso con diferentes modalidades y variantes de estas. No hemos mencionado todas, ya que nos extenderíamos demasiado, pero sí os dejamos los detalles más básicos de las modalidades más conocidas.

Todas tienen su peculiaridad, cada una necesita su material especifico, una preparación y un nivel de esquí diferente y sobretodo, la motivación de un esquiador. ¿Por cual te decides?